La cobaya Sheltie, llamada Silkie en Estados Unidos, es una raza de cobaya de pelo largo cuya característica más distintiva es que el pelo cae hacia atrás desde la cabeza y no parte de forma natural a lo largo de su parte posterior, como sucede con otras cobayas de pelaje abundante, como las peruvianas o peruanas.

Las Sheltie son muy populares como mascotas, al punto de que se organizan exhibiciones y competencias para determinar cuáles son las cobayas más bellas y las más listas.

Ante tal aceptación, hemos querido conformar este artículo, en el que hablamos un poco de la raza de cobayas Sheltie.

Rasgos distintivos

Conocida antes como cobaya Angora, la raza Sheltie se caracteriza por un pelaje abundante que, como dijimos arriba, cae hacia atrás en forma de melena.

Se diferencia de otras razas de pelo largo en que los ejemplares Silkie tienen la cara despejada, y no cubierta por mechones que entorpecen la visión del animal. Asimismo, no presentan la raya en medio del pelaje, distintiva de la cobaya peruviana.

Otra característica fundamental de las cobayas Sheltie, también relacionada con el pelo que es el principal elemento de distinción, es que la textura de este es mucho más suave que la del de otras especies.

Aseo

En el cuidado y cría de cualquier cobaya el aseo es importante, a fin de evitar la aparición de enfermedades que atenten contra el bienestar del animal.

Así, al asear a una Sheltie debe usarse un cepillo suave y un peine de plástico. No se recomiendan los de metal porque por la fuerza de sus púas o dientes pueden tirar excesivamente de los pelos, dañándolos y causando dolor en la mascota.

De igual forma, la manera correcta de hacer el cepillado es en la misma dirección del pelo, poniendo énfasis en la más baja, que es donde suelen enredarse y hacerse nudos.

Debido a esto último los criadores de experiencia aconsejan recortar el pelo a la cobaya una o dos veces al mes. La acción evita los enredos y beneficia la higiene, y cuando único no se recomienda es cuando se proyecta presentar a la cobaya a algún concurso.

Otra opción que tributa a que el pelo de las Sheltie se mantenga brilloso más tiempo entre baño y baño, sin enredarse, es atar una gomita en las uniones del pelaje, sin que apriete mucho.

Además del cepillado, que puede hacerse a diario o tres veces por semana, según el volumen de caída de pelo de la cobaya, en materia de aseo tenemos el baño o lavado.

Este ha de hacerse sin un patrón específico, pero sin abusar de él porque de lo contrario el pelaje perdería su protección y brillo natural. Sólo es necesario bañar a una Sheltie cuando observemos que el pelo está sucio y comienza a oler mal.

Para llevar la tarea a cabo puede optarse lo mismo por un balde que por un grifo, y por jabón hecho para cobayas, aunque si no se dispone de este pueden valer los champús para bebés o para gatos, siempre suaves, o un champú de lavado que sea seco.

De cualquier forma, lo más importante es cuidar que durante el baño no entre agua ni jabón a los oídos, nariz, ojos y boca de la cobaya. Esta especie animal es muy delicada y ello les causaría infecciones, irritaciones y muchos otros males.

Finalizado el baño, se recomienda secar a las cobayas suavemente, con cualquier toalla, para prevenir cualquier resfriado. El empleo de secadoras está desaconsejado, porque dado el nervio natural de estos roedores y su capacidad para asustarse mucho, el ruido podría causar infartos o males similares.

Uñas y dientes

Las uñas y dientes de una cobaya Sheltie, así como los de cualquier otra raza, requieren atenciones especiales.

Las primeras deben ser cortadas al menos una vez por mes o cuando se perciba que se están curvando mucho, lo que evitará dificultades a la cobaya al caminar, deformaciones y desgarramiento de carne en las paticas si las uñas se enterraran.

El cortado debe hacerse con extremo cuidado, prestando atención que no se está cortando en un área donde hay carne. De lo contrario el animalito sangraría y la mejor respuesta en ese caso es utilizar un lápiz hemostático o cualquier otro producto que permita frenar la hemorragia.

En cuanto a los dientes, deben ser revisados con periodicidad, a fin de detectar alguna mala oclusión dental que condicione un crecimiento excesivo de las piezas, que a la postre puede provocar heridas, infecciones y más.

Un síntoma frecuente de esto es la salivación desmesurada. Dado el caso, lo mejor para la cobaya Sheltie es que el dueño acuda al veterinario para que le haga una limadura bajo sedación, si fuese necesario, o cualquier otra cosa que acabe con el problema.

A diferencia de las uñas, los dientes de las mascotas no deben ser nunca cortados o limados por los propietarios. Ni con tijeras, ni con cualquier otro accesorio parecido, que solo provocarían roturas de ligamentos, desviaciones mayores y otros males. Lo indicado es acudir al veterinario, persona capacitada para tratar acertadamente al animal.

Cuidados médicos

Ya que hablamos de veterinario, en el cuidado de una cobaya Sheltie son obligadas las visitas a él cada tres o cuatro meses, para que la sometan a una revisión global.

Este período puede romperse si en la observación de nuestras mascotas vemos que presentan heces más blandas de los común, estornudan con frecuencia, producen excesivo moco, saliva o lagañas, o pasan trabajo para respirar.

Igualmente, otros cuadros que demandarán como respuesta visitas al veterinario son los ojos entrecerrados, la presencia de arañazos profundos, calvicie y dificultades para desplazarse.

Alimentación

Muchos de los males comunes en las cobayas Sheltie son prevenibles a partir de una correcta higiene, ya ilustrada, y una alimentación sana.

Con respecto a esta última, se aconseja alimentar a las cobayas con heno, verduras y pan duro para roer, pero sin excesos para evitar la obesidad.

Ello contribuirá al desgaste de los dientes, así como a la obtención de nutrientes como vitaminas, que no vienen en las cantidades necesarias en el pienso especial para cobayas, como sí vienen en las frutas y verduras, alimentos indispensables para que nuestra mascota goce de una dieta equilibrada, integral y sana.